CITA
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Una hora más tarde, sentados en el largo salón del prostíbulo de la Trini, situado en los aledaños del SEPU, los descubrió un vigilante de estudios, rebotado de cura y con la lívido almacenada durante diez años de Seminario, que había acudido al antro para pegarse el polvete semanal aprovechando que las clases estaban suspendidas. Al verlos se sonrojó y, sacando fuerzas del ridículo, les gritó:
–¡Os he pillado, golfos!
Y como si fuesen una cuerda de presos los condujo hasta el despacho del Director desde donde las hostias se oyeron por encima de las torres del Pilar.
UBICACIÓN
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